Primera semana del año 2012

Miles de niños, atravesaron contentos las rejas que permiten el acceso a este jardín en pleno corazón de Barquisimeto. Se deleitaron con la colección de monos, se asombraron cuando vieron al manatí salir de su laguna, y se sorprendieron con los leones. En fin, derrocharon energía alrededor de las 19 hectáreas que constituyen el parque, diseñado para recrear, pero con un claro objetivo de educar.
Más de 2.000 personas disfrutaron, diariamente, desde un serpentario que cuenta con una interesante muestra de reptiles, hasta un mirador donde se fomenta en la comunidad el estudio de la ciencia y la tecnología. El tradicional “trencito” también estuvo al servicio de cientos de familias la primera semana del año, quienes recorrieron el parque muy atentos a los animales que veían a su alrededor.
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